Las laderas nevadas de las Montañas Rocosas pueden parecer muy alejadas del North Carolina, pero una reciente citación emitida por la Agencia de Protección del Medio Ambiente de los Estados Unidos (EPA) demuestra que el peligro derivado de la exposición al productos que contienen amianto puede aparecer en cualquier sitio.
En enero de 2014, un promotor compró una extensión de terreno en Eagle, Idaho, al noroeste de Boise, con planes para desarrollar un parque de esquí y snowboard. El promotor contrató a un consultor para que inspeccionara los edificios existentes en busca de amianto. El consultor descubrió que había materiales de amianto y presentó una oferta para retirar los materiales antes de la demolición. El promotor rechazó la oferta y demolió los edificios sin retirar primero los productos que contenían amianto encontrados por el consultor.
Como el amianto no se había retirado antes de la demolición de los edificios, los escombros contenían grandes cantidades de fibras de amianto. La EPA inició una investigación de la demolición tras recibir una denuncia pública. De acuerdo con la citación de la EPA, el promotor debe tomar medidas para evitar la propagación del polvo procedente de los escombros contaminados y limpiar los escombros de conformidad con la normativa estatal y federal.
Este caso demuestra una vez más que el amianto sigue constituyendo un grave peligro para el medio ambiente. Este mineral se utilizaba como ignífugo y aislante en muchos edificios que siguen en pie. Cada vez que se derriba o renueva uno de estos edificios, primero hay que retirar el amianto. Cualquier persona que crea que puede haber sido víctima de la exposición a productos con amianto debe consultar a un médico para determinar si corre el riesgo de desarrollar una enfermedad relacionada con el amianto, como asbestosis o mesotelioma. Cualquier persona que reciba un diagnóstico positivo puede desear buscar asesoramiento legal para determinar si se pueden recuperar daños y perjuicios.
Fuente: Agencia de Protección del Medio Ambiente, EPA: Boise-based ski and snowboard park developer required to properly clean up asbestos to protect workers and area residents", Mark MacIntyre, 13 de abril de 2015.