Un hospital de veteranos podría haber expuesto a empleados y pacientes al amianto

Durante décadas, los trabajadores estadounidenses, desde mecánicos de automóviles hasta obreros de la construcción, sufrieron la exposición a un compuesto mortal. Sin embargo, una vez que la ciencia médica relacionó el amianto con cánceres graves y a menudo mortales como el mesotelioma, las leyes cambiaron para obligar a proteger a los trabajadores en presencia de este recurso peligroso pero de uso común.

Debido, en gran parte, a la creciente concienciación cultural sobre el peligro que entraña el amianto, siguen saliendo a la luz más historias sobre la peligrosa exposición a este conocido carcinógeno. Recientemente, el amianto ha vuelto a las portadas debido a las acusaciones de que un Hospital de veteranos de Massachusetts conocían los riesgos del amianto y no hicieron nada. La inacción durante años puede haber expuesto a esta peligrosa sustancia a innumerables trabajadores y veteranos necesitados de atención médica.

Hospital de veteranos de Massachusetts gravemente contaminado con amianto

El martes 1 de mayo de 2018, la Oficina del Asesor Jurídico Especial de los Estados Unidos hizo públicas las denuncias de que múltiples edificios del Edith Nourse Rogers Memorial Veterans Hospital tenían niveles preocupantes de contaminación por amianto. Peor aún, la dirección lo sabía desde una inspección de la OSHA de 2014, pero no tomó medidas para abordar este grave factor de riesgo.

De hecho, incluso evitaron inspeccionar detenidamente las instalaciones para determinar qué zonas estaban contaminadas y cuáles no. Fue necesario que unos denunciantes dieran a conocer la contaminación para que se tomaran medidas. La investigación que se llevó a cabo demostró que los trabajadores corrían riesgos innecesarios debido al amianto transportado por el aire. Unas prácticas y equipos de seguridad adecuados podrían haber protegido mejor a esos trabajadores. Si la dirección hubiera revisado el informe de la OSHA y tomado medidas, esos trabajadores podrían haber evitado la peligrosa exposición a una sustancia que podría causar cáncer muchos años después.

Los cánceres relacionados con el amianto tardan mucho en desarrollarse

Una de las razones por las que el amianto fue popular en aplicaciones comerciales durante tanto tiempo fue porque era barato y simplemente no había pruebas que lo relacionaran directamente con acontecimientos médicos graves. Ahora sabemos que las afecciones médicas y los cánceres relacionados con el amianto pueden tardar muchos años o incluso décadas en desarrollarse y presentar síntomas. Esto no cambia el hecho de que estas enfermedades graves, a menudo mortales, se derivan directamente de la exposición al amianto.

Los empresarios y propietarios deben tomar todas las medidas posibles para proteger a los empleados, inquilinos y clientes de los peligros relacionados con la exposición al amianto. Cualquier indicio de contaminación por amianto debe ser motivo de un examen minucioso y, a continuación, de medidas correctoras. No tomar medidas rápidas y decisivas podría significar la exposición innecesaria de personas inocentes a una sustancia potencialmente mortal.

Quienes acaban desarrollando afecciones como el mesotelioma, relacionadas con la exposición al amianto, tienen derecho a solicitar una indemnización. Existen fondos especiales para las personas diagnosticadas de mesotelioma. En algunos casos, como la exposición debida a negligencia del empresario o a polvos de talco, una demanda por lesiones personales o por homicidio culposo también puede ser una opción para recuperar las pérdidas económicas.

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