Algunos puestos de trabajo pueden exponer a los trabajadores al riesgo de desarrollar enfermedades laborales graves. Esto puede ser especialmente cierto para los trabajadores que han estado expuestos al amianto en el trabajo. Desde hace décadas se sabe que este mineral puede causar daños catastróficos a la salud de una persona si se inhala o ingiere. Pero a pesar de este conocimiento, muchos empresarios siguen sin advertir adecuadamente a los empleados de estos riesgos y sin protegerlos de la exposición.
En muchos casos, esta negligencia se debe al deseo de ahorrar dinero. Proporcionar la formación adecuada y el equipo de protección que necesitan los trabajadores puede resultar caro y muchas personas intentan reducir costes eludiendo estos requisitos. Cuando esto ocurre, es el empleado quien acaba pagando el precio si desarrolla una enfermedad relacionada con el amianto, como el mesotelioma.
Pero es importante que estas víctimas recuerden que tienen derecho a exigir responsabilidades a un empresario negligente por las conductas que contribuyeron a su enfermedad. Un trabajador puede optar por hacerlo después de que se denunciara que un hombre para el que trabajaba cometió numerosas infracciones relacionadas con el amianto, poniendo en peligro su salud.
El empresario estaba terminando un trabajo de reducción de amianto. Contrató a un ayudante de 50 años para que le ayudara en el proyecto, pero no le proporcionó equipo de protección. Mientras retiraba los materiales de amianto, el empresario tampoco se deshizo adecuadamente de los materiales tóxicos. Los informes indican que durante el proyecto se liberaron al aire más de 1.000 libras de polvo de amianto.
No sólo el trabajador está en peligro de desarrollar una enfermedad relacionada con el amianto debido a la falta de protección durante el trabajo, sino que los residentes de la zona también pueden estar en riesgo si respiraron el polvo que se liberó. Lamentablemente, es posible que las verdaderas repercusiones de la negligencia de este hombre no se conozcan hasta pasadas décadas, ya que los síntomas del mesotelioma, el amianto y el cáncer de pulmón pueden tardar ese tiempo en manifestarse.
En los casos de trabajadores expuestos al amianto, puede ser conveniente que soliciten indemnización por accidente laboral para ayudar a cubrir los costes de las pruebas, el tratamiento y los salarios perdidos relacionados con la exposición. Estos gastos pueden ser considerables, por lo que las víctimas también pueden presentar una demanda civil contra la parte negligente. El dinero no puede reparar los daños causados por la exposición al amianto, pero puede aliviar la carga financiera que a menudo soportan las víctimas.
Fuente: CNY Central, "Detenido un hombre de Watertown por liberar amianto en el aire a sabiendas", 14 de noviembre de 2013.