Los procedimientos deficientes de retirada del amianto pueden provocar la muerte

En general, la gente comprende los peligros del amianto. Desgraciadamente, son demasiadas las personas que no extienden este conocimiento a otras que podrían enfermar gravemente si se vieran expuestas. Los empresarios no informan a sus empleados de que van a trabajar con amianto; los fabricantes de productos no informan a los consumidores de que sus productos contienen la peligrosa fibra; los propietarios no informan a los inquilinos o visitantes de que hay amianto en las instalaciones.

Lamentablemente, incluso las personas contratadas para manipular y retirar el amianto por su peligrosidad no son conscientes del daño que puede causar a la salud de los demás. Se toman atajos o infringen la ley con el fin de obtener beneficios, y esto puede ocurrir a expensas de la vida de otras personas. Es importante comprender que estas personas también pueden ser consideradas responsables si sus acciones tienen como consecuencia la muerte de un ser querido.

Los especialistas en reducción de amianto son contratados específicamente porque se supone que deben manipular, retirar y eliminar el amianto de acuerdo con la normativa estatal y federal. Las personas que carecen de la certificación y la experiencia adecuadas normalmente no tienen ni idea de cómo tratar el amianto, por lo que puede ser necesario pagar a otra persona para que lo haga.

Trágicamente, hay empresas y empresarios que no cumplen lo que prometen. Dicen que van a retirar el amianto, pero no lo hacen; dicen que van a eliminar el amianto adecuadamente, pero no lo hacen; dicen que las instalaciones son seguras, pero no lo son.

Por ejemplo, recientemente un hombre fue declarado culpable de infringir la normativa sobre amianto y la Ley de Aire Limpio. Fue contratado para retirar el amianto de una iglesia, pero al parecer contrató a trabajadores sin formación e incumplió una serie de normas de retirada que provocaron una exposición potencialmente mortal.

El hombre se enfrentará sin duda a penas por la condena penal, pero también puede enfrentarse a penas civiles si alguno de sus antiguos empleados o clientes se entera de que su salud se ha visto comprometida como consecuencia de las acciones negligentes de este hombre.

Fuente: Mlive.com, "Piden hasta 5 años de cárcel para un contratista por la retirada ilegal de amianto en la Academia Bay City," Cole Waterman, 13 de marzo de 2015.