La retirada de residuos de la construcción expone a las personas al riesgo de contraer mesotelioma

Cuando se ha detectado amianto en determinados materiales, es imprescindible eliminarlos de forma adecuada y segura. No pueden tirarse simplemente a la basura junto con otros residuos. Esto se debe a que el amianto es tóxico y representa un grave riesgo para la salud de las personas si se exponen a las partículas suspendidas en el aire. amianto fibras o polvo.

Debido a la amenaza que supone para la salud humana, el amianto debe manipularse y eliminarse de acuerdo con las estrictas leyes federales establecidas por la Agencia de Protección del Medio Ambiente. Existen directrices sobre quién puede retirar el amianto, cómo debe hacerse y dónde debe enviarse el amianto retirado para su eliminación. El incumplimiento de estas normas no sólo puede meter a una persona en serios problemas, sino que también puede poner a otras personas en peligro de desarrollar una enfermedad relacionada con el amianto. Recientemente, un hombre fue condenado a prisión por la eliminación insegura de amianto, pero son los residentes cercanos al amianto vertido ilegalmente los que pueden enfrentarse a las consecuencias más devastadoras de esta negligencia.

Según los informes, el hombre era una de las al menos cinco personas implicadas en el vertido ilegal de residuos de la construcción cerca del río Mohawk. Los escombros contenían amianto, por lo que deberían haberse eliminado de acuerdo con la normativa de la EPA. Pero, en lugar de ello, los trabajadores decidieron tomar atajos vertiendo más de 400 camiones cargados de materiales de amianto en una propiedad cercana al río.

Las autoridades están muy preocupadas por la contaminación del río por el amianto, que podría tener consecuencias muy graves para las personas que viven aguas abajo. Las personas que inhalan o ingieren partículas de amianto pueden sufrir numerosos problemas de salud cuando las fibras se alojan en los pulmones, ya que pueden provocar mesotelioma o cáncer de pulmón.

Todos los trabajadores implicados en la actividad ilegal han sido condenados a prisión y a pagar un total de $1 millones para cubrir los costes de limpieza de las zonas afectadas y la restitución. Violar las leyes para ahorrar dinero durante un proyecto de construcción o demolición es extremadamente irresponsable, pero las empresas siguen intentando salirse con la suya, especialmente cuando se trata del amianto. Las víctimas de enfermedades relacionadas con el amianto tienen derecho a exigir responsabilidades a estas partes por los daños que han sufrido como consecuencia de acciones imprudentes o negligentes.

Fuente: Sobrevivir al mesotelioma, "Condenado el último implicado en una trama de vertidos de amianto," 7 de octubre de 2013

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