Uno de los riesgos medioambientales más conocidos de los últimos 30 años ha sido la aparición de enfermedades respiratorias provocadas por las fibras de amianto transportadas por el aire. El amianto es un mineral natural que se utilizaba en todo tipo de aplicaciones industriales antes de que se conocieran sus efectos sobre la salud. En North Carolina, el material se utilizaba sobre todo en las industrias textil, de la construcción y naval, pero su durabilidad y resistencia al calor también lo hacían adecuado para muchas otras industrias.
Al cortarse, romperse o desgastarse, las fibras de amianto se liberan a la atmósfera y pueden ser inhaladas fácilmente por las personas que se encuentren en la misma zona. Las personas que trabajaban directamente con el amianto, como los instaladores de tuberías que lo utilizaban para aislamiento o juntas de válvulas, mostraron los primeros efectos adversos de la fibra blanca. Pero ahora se pueden encontrar víctimas de la exposición al amianto en casi cualquier industria. Una vez inhaladas, las fibras se alojan en el revestimiento pleural del pulmón, y se ha demostrado que causan una forma especialmente mortal de cáncer conocida como mesotelioma. La asbestosis es otra enfermedad relacionada con la inhalación de fibras transportadas por el aire. Las enfermedades relacionadas con el amianto, principalmente el mesotelioma y la asbestosis, tienen un "periodo de latencia" muy largo, es decir, pueden pasar más de veinte años antes de que la víctima desarrolle síntomas.
Una persona que haya contraído una enfermedad relacionada con el amianto puede reclamar daños y perjuicios a los fabricantes del amianto y de los productos que lo contengan. Entre las señales de alarma figuran la fatiga, el dolor torácico y la dificultad para respirar. Toda persona que presente estos síntomas debe ponerse en contacto con un médico para que le diagnostique y le trate. Si desea presentar una demanda por daños y perjuicios, debe ponerse en contacto con un abogado o un bufete de abogados con experiencia en este tipo de casos. Las reclamaciones son complejas desde el punto de vista jurídico y científico, por lo que es necesario un abogado experto para garantizar el mejor resultado posible.
Fuente: Lawyers and Settlements, "Asbestos Mesothelioma Lawsuits", 1 de agosto de 2014.