El retraso legislativo permite seguir expuesto a material tóxico

Hemos explorado en detalle los peligros asociados a la exposición al amianto. Los riesgos de la exposición han llevado a prohibir la sustancia en la mayoría de los materiales, pero la amenaza del contacto con la fibra sigue existiendo. El amianto se encuentra principalmente en los materiales de fabricación y construcción anteriores a la década de 1980. Cuando se renuevan o derriban edificios, la probabilidad de que el amianto se libere al aire puede ser bastante alta.

Muchos trabajadores de la construcción o de la industria manufacturera de décadas anteriores pueden haber inhalado o ingerido amianto en suspensión en el aire en el lugar de trabajo. Como resultado, muchos de los empleados desarrollaron diversos tipos de enfermedades pulmonares causadas por el amianto.

El amianto se ha utilizado en aislantes, baldosas para techos y suelos, pintura, cemento y otros materiales de construcción. Las empresas de la construcción deben estar especialmente atentas para proteger a sus trabajadores de la peligrosa exposición al amianto y a otras sustancias nocivas. Recientemente, se ha identificado otro material potencialmente tóxico que puede inhalarse como un riesgo para las personas que trabajan en la construcción.

El polvo se denomina sílice cristalina. Se encuentra con frecuencia en la arena, el granito y otros productos utilizados en materiales de construcción. La inhalación de este polvo puede provocar silicosis (enfermedad respiratoria relacionada con el cáncer de pulmón) en algunos trabajadores. Al igual que la asbestosis y el mesotelioma, este cáncer puede ser mortal.

Las recientes iniciativas para limitar legalmente los niveles de exposición al material se han visto atascadas en la burocracia legislativa. Los legisladores llevan casi un año estudiando la situación. Al endurecer las restricciones sobre los niveles de exposición al sílice, las empresas pueden haber aumentado los costes de producción, que es la principal preocupación de los grupos de intereses especiales.

Los funcionarios del trabajo y los defensores de la salud han expresado con vehemencia su enfado por el retraso de la legislación. Al igual que la exposición al amianto, cuanto más tiempo esté una persona en contacto con el sílice, mayores son las probabilidades de que desarrolle una enfermedad devastadora. Desde hace décadas se conocen los peligros asociados a un contacto prolongado con el sílice. Al seguir permitiendo la exposición ilimitada al sílice, los empresarios siguen poniendo en peligro la vida de los trabajadores.

Para los trabajadores de la construcción, los peligros que pueden experimentar en un lugar de trabajo pueden causar problemas de salud a largo plazo. Para quienes han sufrido daños en el trabajo, puede haber métodos de percibir una indemnización por el dolor o el sufrimiento experimentados como consecuencia de ello.

Fuente: El Huffington Post, "Los defensores de la seguridad de los trabajadores afirman que la norma sobre el sílice sigue en la Casa Blanca y pone en peligro vidas humanasDave Jamieson, 25 de enero de 2012