La familia de una víctima de la exposición al amianto recibe $1,4 millones

Las enfermedades causadas por la exposición al amianto pueden ser algunas de las más devastadoras. Muchas víctimas de mesotelioma, asbestosis y otros tipos de cáncer de pulmón suelen desarrollar la enfermedad mucho antes de notar ningún síntoma. De hecho, el diagnóstico de estas enfermedades suele llegar décadas después de que se haya producido la exposición. Aún más inquietante es que pueden ser bastante agresivas. Cuando una víctima se entera de que padece una enfermedad relacionada con el amianto, ya es demasiado tarde para que el tratamiento sea eficaz. En muchos casos, es sólo cuestión de unos meses que la persona fallezca.

Por ello, muchas familias tienen que enfrentarse a las consecuencias de la exposición. Sobrellevar la pérdida de un ser querido es extremadamente difícil, pero las familias tienen opciones cuando se trata de responsabilizar a una parte negligente por la fatalidad y buscar compensación. Una mujer emprendió recientemente acciones legales contra una compañía ferroviaria tras la muerte de su marido.

Al parecer, el hombre había trabajado para GM&O Railroad durante más de 15 años. En el transcurso de su empleo, estuvo expuesto a niveles tóxicos de amianto, según la demanda presentada por su familia. En la demanda se argumentaba que la compañía ferroviaria no sólo sabía que sus trabajadores estaban expuestos al amianto, sino que no hizo nada para protegerlos de la enfermedad. El hombre falleció en 2009 de una enfermedad relacionada con el amianto.

El caso fue a juicio y el jurado determinó que la familia del hombre tenía derecho a indemnización. Concedieron a la familia $1,4 millones por la muerte por negligencia.

Los trabajadores del ferrocarril se encuentran entre los más expuestos a condiciones de trabajo peligrosas. El amianto se utilizaba ampliamente en una serie de productos empleados en las locomotoras, incluidos los frenos. A menudo, los trabajadores del ferrocarril respiraban un fino polvo de amianto provocado por el desgaste de los forros de los frenos. Una vez inhalado el polvo, las partículas de amianto pueden causar daños importantes y, en última instancia, mortales en los pulmones.

Obtener una indemnización por la muerte por negligencia de un ser querido no es algo que pueda deshacer la devastación de una pérdida. Sin embargo, es una forma de que los familiares de una víctima puedan responsabilizar a un empleador negligente por mantener entornos de trabajo peligrosos y compensarles por los costes asociados al tratamiento médico, los salarios perdidos y el trauma emocional.

Fuente: Pantagraph, "Una familia obtendrá $1,4 millones en un juicio por amianto", 26 de junio de 2013.