En nuestro último post, discutimos el hecho de que muchas demandas por lesiones personales se resuelven a través de un acuerdo, no un juicio. También mencionamos el hecho de que antes de que una persona acepta o rechaza un acuerdo, varios factores debe tenerse en cuenta.
Uno de esos factores consiste en decidir si una oferta de acuerdo es suficiente para cubrir los importantes gastos en que incurre una persona tras ser diagnosticada de una enfermedad grave. Para ello, usted y sus seres queridos querrán tener en cuenta muchas cosas.
El mayor gasto que suelen tener las personas son sus gastos médicos. Las enfermedades graves y agresivas, como el mesotelioma y el cáncer de pulmón, pueden requerir pruebas frecuentes y continuas, por no hablar de medicamentos potentes e incluso cirugía. No hace falta mucho para que estas facturas se acumulen y se vuelvan enormes.
Otros gastos a los que puede haber tenido que hacer frente son los cambios en su vivienda. Por ejemplo, puede que haya tenido que construir rampas y añadir barandillas para que la casa sea segura para una persona físicamente débil o en silla de ruedas. Además, es posible que haya tenido que contratar asistencia a domicilio para ayudar a una persona enferma a realizar sus actividades cotidianas.
En caso de que una persona haya fallecido, es probable que tenga gastos derivados del funeral y/o la mudanza; también es posible que tenga que hacer frente a la pérdida de los ingresos que pudiera haberle proporcionado su ser querido.
Éstos son sólo algunos tipos de daños de los que la gente tiene que preocuparse tras el diagnóstico de una enfermedad relacionada con el amianto. Hay muchos otros, incluidos los daños no económicos como el dolor y el sufrimiento, así como los honorarios legales. Todos ellos deben sumarse para ver si es apropiado llegar a un acuerdo o ir a juicio, ya que todos estos gastos podrían recuperarse a través de una demanda legal.
Si le han diagnosticado una afección como el mesotelioma o tiene un ser querido que ha fallecido a causa de una enfermedad de este tipo, es probable que sea bastante consciente del peaje financiero que estas graves enfermedades pueden suponer para las víctimas y sus familias. Sin embargo, hablar con un abogado sobre el alcance total de los daños sufridos puede ayudarle a determinar cuál podría ser la cantidad adecuada a reclamar a través de un litigio o una negociación.