Denunciante: Trabajadores del hospital VA expuestos al amianto

Se espera de los empresarios que mantengan a salvo a sus empleados cuando tengan que realizar trabajos que les expongan a sustancias o productos químicos nocivos. Por desgracia, no todos los empresarios lo hacen y los trabajadores acaban pagando las consecuencias. En algunos casos, la exposición tóxica a materiales como el amianto provoca enfermedades devastadoras como el mesotelioma.

Esta es la amenaza a la que se enfrentan los trabajadores de mantenimiento de un hospital de veteranos tras descubrirse que han estado trabajando, sin protección, con amianto. Fueron necesarias las acciones de un denunciante y una investigación federal para descubrir las acciones inseguras y potencialmente ilegales de los gestores del centro médico.

Según los informes, varios empleados del centro médico han estado potencialmente expuestos al amianto tóxico, entre ellos fontaneros, instaladores de tuberías y otros trabajadores de mantenimiento.

Un denunciante que informó de la situación declaró que los empleadores y gestores del hospital no avisaron debidamente a estos trabajadores de que trabajaban con amianto y no les proporcionaron ningún equipo de protección para minimizar la exposición. El denunciante también declaró que los gerentes conocían la existencia del amianto pero que, de todos modos, hacían que los trabajadores realizaran trabajos con amianto.

Se inició una investigación federal y se descubrió que los trabajadores estaban expuestos al amianto porque no estaban debidamente protegidos contra la inhalación de las fibras. Sin embargo, no se pudo confirmar que los empleadores del hospital tuvieran conocimiento del amianto, que es lo que alega el denunciante. La oficina del inspector sí hizo una serie de recomendaciones sobre cómo deben realizarse en el futuro los trabajos en los que haya amianto.

Por desgracia, para los trabajadores que ya han estado expuestos, el daño puede estar hecho. Las fibras de amianto pueden alojarse en los pulmones de una persona, donde pueden no causar ningún problema durante décadas, y luego, aparentemente en un abrir y cerrar de ojos, pueden empezar a aparecer los síntomas de una enfermedad grave. Desgraciadamente, a estas alturas ya no hay forma de deshacer el daño y la persona puede estar bastante enferma.

Por eso es tan importante que los empresarios cumplan unos procedimientos estrictos de manipulación del amianto e informen a los trabajadores de los posibles riesgos para la salud. No hacerlo puede tener consecuencias graves y devastadoras. Si le preocupa la exposición al amianto en el trabajo, puede ser crucial que primero reciba atención médica y luego hable con un abogado si desea obtener prestaciones y/o una indemnización.

Fuente: San Antonio Express-News, "Un denunciante de SA afirma que un hospital de veteranos expuso a sus trabajadores al amianto," Sig Christenson, 11 de septiembre de 2015.

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