Prisioneros utilizados para limpiar amianto

Tomar la decision de exponer a las personas al asbesto puede ser una eleccion de vida o muerte. Por desgracia, demasiadas personas toman esta decisión a la ligera y sin comprender realmente que pueden estar poniendo en peligro la vida de otras personas. Pueden pensar que como las enfermedades relacionadas con el amianto tardan tanto en desarrollarse, nunca tendrán que asumir la responsabilidad de sus actos.

Sin embargo, muchas víctimas de la exposición son capaces de rastrear su exposición a un empleador negligente o propietario con los muchos recursos que están disponibles hoy en día. Además, la mejora de las denuncias de este tipo de conductas imprudentes ha dado lugar a un sistema más público de responsabilizar a alguien por prácticas peligrosas con el amianto.

Por ejemplo, recientemente se informó de prácticas extremadamente cuestionables en una prisión de otro estado. Las fuentes indican que el Departamento Correccional del estado ha estado utilizando a reclusos como trabajadores para retirar materiales de la prisión contaminados con amianto.

Al parecer, los reclusos habían recibido formación sobre la retirada de amianto y se les había proporcionado equipo de protección, pero aún así se permitieron muchas infracciones. Según los informes, los trabajadores no siempre llevaban puestas las mascarillas y los guantes y no mojaban adecuadamente los materiales contaminados ni los aspiraban. A pesar de conocer todos estos problemas del proceso, los supervisores encargados de vigilar el trabajo de los internos no tomaron ninguna medida para solucionar la situación. Se argumenta que se tomaron atajos para acelerar el proceso de instalación del nuevo suelo.

El programa de utilización de reclusos para eliminar el amianto se ha cerrado desde entonces, pero la agencia citada por las numerosas infracciones afirma que no se cerró debido a prácticas deficientes. Por el contrario, afirman que el riesgo de exposición era demasiado elevado. Lamentablemente, sólo reconocieron este riesgo después de que los trabajadores realizaran 15 trabajos de reducción en un año, y después de haber sido citados por prácticas deficientes.

Las partes que permiten que los trabajadores estén expuestos al amianto sin proporcionarles la formación, las advertencias y el equipo de protección adecuados podrían estar poniendo a esas víctimas en riesgo de desarrollar una enfermedad devastadora y, en última instancia, mortal. Nadie debería sufrir por este tipo de negligencia. Las personas que han estado expuestas al amianto deben recordar que todas las víctimas tienen derecho a consultar a un abogado para entender qué opciones legales pueden estar disponibles.

Fuente: The Bellingham Herald, "El Estado pone fin a la limpieza de amianto por los presos", Jordan Schrader, 21 de abril de 2014.