Llevamos mucho tiempo hablando de los peligros que entraña la exposición al amianto. Desde hace varios años, se sabe que mesotelioma está causada por el contacto y la exposición prolongada a la sustancia tóxica, pero puede haber causas adicionales. Estudios recientes han demostrado que otro material fibroso también puede provocar la enfermedad pulmonar.
La erionita es una sustancia similar al amianto. Suele encontrarse en rocas cercanas a cenizas volcánicas, aunque también puede estar presente en la grava que pavimenta las carreteras. Los estudios demuestran que se ha encontrado erionita en carreteras de grava de todo el país. Los vehículos que circulan por estas carreteras pueden estar levantando polvo tóxico que puede ser ingerido o inhalado por transeúntes desprevenidos.
Hace tiempo que exploramos los posibles peligros de la exposición a la erionita, pero no se establecieron conexiones concretas entre la fibra y el mesotelioma. Sin embargo, recientemente se ha realizado un estudio en el Centro Oncológico de la Universidad de Hawai que podría confirmar la existencia de una conexión.
En el estudio se examinó la erionita de los caminos de grava encontrados en Dakota del Norte. Se inyectó la sustancia en ratones y se les observó. Los resultados mostraron que los ratones desarrollaron los mismos síntomas que los asociados al mesotelioma. Sus pulmones estaban inflamados y había un crecimiento celular anormal, que son dos indicadores tempranos del mesotelioma. Otros síntomas del mesotelioma son dificultad respiratoria y sibilancias, fatiga, pérdida de peso inexplicable y dolores torácicos.
Es probable que se sigan investigando los efectos de la exposición a la erionita. Mientras tanto, es importante que la gente sea consciente de la peligrosidad de este material. Esperemos que, con nuevas investigaciones, sea más fácil para el ciudadano medio identificar, evitar o eliminar de forma segura cualquier rastro de erionita.
Fuente: News4Jax, "Una nueva investigación relaciona el polvo de la carretera con el mesotelioma", Ed Greenberger, 7 de marzo de 2012.