Cuando compras un medicamento en la farmacia North Carolina de tu barrio, probablemente das por sentado que su uso es seguro. Al fin y al cabo, no lo venderían si fuera peligroso, ¿verdad? En realidad, el uso y la distribución de medicamentos potencialmente nocivos a veces se produce antes de que el público y los profesionales médicos sean conscientes de sus verdaderos riesgos. Uno de estos medicamentos es el Zantac, que se utiliza habitualmente para tratar la acidez estomacal.
La acidez, las úlceras, los ácidos y otras afecciones son las que trata Zantac. Sólo después de su amplia difusión entre el público descubrieron los investigadores que contenía una sustancia química a menudo relacionada con el cáncer. Tras conocer que el fármaco era potencialmente nocivo, la Administración de Alimentos y Medicamentos retiró el medicamento, tanto las fórmulas de venta con receta como las de venta libre.
La sustancia química específica de Zantac que preocupa a los usuarios se denomina N-nitrosodimetilamina. Hay pruebas de su presencia tanto en la versión genérica como en la de marca. La FDA inició la retirada del producto y envió inmediatamente peticiones al fabricante para que lo retirara de los estantes. Al mismo tiempo, la FDA también pidió a los usuarios que dejaran de tomar el medicamento inmediatamente y se deshicieran de las dosis restantes de forma adecuada.
El NDMA presente en este tipo de medicamentos es un contaminante medioambiental. Está clasificado como carcinógeno, lo que significa que se considera peligroso para el ser humano. Existen pruebas que relacionan la exposición a largo plazo al NDMA en grandes cantidades con el cáncer gástrico, colorrectal y otros tipos de cáncer. El daño hepático es un efecto secundario potencial de la exposición incluso a pequeñas cantidades. En la actualidad, el único uso aceptable de esta sustancia química es la investigación.
Muchas personas han emprendido acciones legales por los efectos de la exposición al NDMA en Zantac. Si su salud se resintió como consecuencia de la medicación que tomó, creyendo que era segura, también podría tener motivos para emprender acciones legales. Le conviene actuar con rapidez si crees que podrías tener un caso.
Aunque la indemnización no puede revertir lo que le ocurrió a usted o a un ser querido, puede permitirle recuperar las pérdidas que sufrió como consecuencia de sus problemas de salud. Debido al número de personas que solicitan una indemnización tras consumir Zantac, es posible que en el futuro se presenten demandas colectivas. Puede ser útil explorar todas sus acciones legales con respecto a su búsqueda de recompensa por el litigio de Zantac.